Con sólo 6 años y 335 días, Simar Khurana se ha convertido en la desarrolladora de videojuegos más joven del mundo al crear un videojuego divertido, pero también educativo, para niños.
No es raro que los niños de esa edad pasen gran parte de su tiempo libre jugando a videojuegos, pero la joven de Beamsville (Ontario, Canadá) decidió que ella también quería crearlos. Por eso, hace menos de un año empezó a aprender codificación, tomando tres clases a la semana.
Paras, el padre de Simar, es quien se dio cuenta de la aptitud y habilidad de su hija para las matemáticas y la codificación.
"Simar aprendió matemáticas sola viendo vídeos de YouTube", nos cuenta. "En la guardería era capaz de hacer matemáticas de tercer curso. Hacía manualidades y juegos con lo que tenía, a veces con papel usado.
"Pensé que destacaría de forma natural en codificación, ya que tenía una combinación ideal de habilidades. Así que la llevé a probar una clase de codificación de demostración que le encantó".
Encontrar una clase de programación para Simar no fue fácil, porque la mayoría de los institutos de programación se negaban a aceptarla por su edad.
El desarrollo de juegos requiere lectura y escritura avanzadas, y a la mayoría le costaba creer que Simar pudiera hacer ambas cosas a un nivel tan alto para su edad. Sin embargo, tras una larga búsqueda, se encontró un profesor y por fin empezó el viaje de desarrollo de Simar.
Tras unos meses de clases, decidió que quería crear un videojuego para niños de su edad.
Después de una visita al médico de cabecera, que la sermoneó a ella y a su hermana mayor por comer comida basura, se le ocurrió la idea del juego, al que llamó Healthy Food Challenge.
El médico me dijo que tenía que comer sano, así que decidí hacer un juego sobre comida sana y comida basura - Simar
De una forma muy original, Simar quiere ayudar a sus compañeros a aprender lo que se considera comida sana y no sana, cuál es el impacto de la comida basura y lo importante que es llevar una dieta equilibrada desde pequeños.
Sin embargo, crear el Healthy Food Challenge desde cero no fue... pan comido.
De hecho, cuando Simar y su padre decidieron que ella intentaría conseguir el título de Guinness World Records, se dieron cuenta de que sólo disponían de cuatro meses para hacerlo y así cumplir el límite de edad.
"Simar estaba decidida y dispuesta a trabajar duro", afirma Paras. "Aumentamos sus clases [...], empezó a tomar 4 clases a la semana. Al mismo tiempo, estaba aprendiendo danza, gimnasia y kárate, que también quería continuar".
"Imagínate a una niña de 6 años que va al colegio y después tiene 1-2 clases cada día y tiene que hacer proyectos de codificación que requieren 1-2 horas de práctica cada día.
"Era intenso, [lo sería] incluso para un adulto".
A Simar le encantan las matemáticas y la programación, y dice que de mayor quiere ser desarrolladora de videojuegos.
Bueno, técnicamente, ¡ya lo es!
Recientemente, ha dado sus primeros pasos hacia la IA y el aprendizaje automático. Todos estos conocimientos son útiles para cualquiera que se tome en serio el desarrollo de juegos y aplicaciones educativas para niños.
También tiene un canal de YouTube, llamado Simar's World, a través del cual pretende conectar con otros niños y compartir sus ideas para más juegos.
Simar está muy contenta con su logro y, cuando se le preguntó, no dijo que no a la posibilidad de intentar batir más récords en el futuro.
Con un récord tan emblemático en su haber antes de cumplir los siete años, ¡estamos impacientes por ver qué le depara el futuro a la pequeña Simar!
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