Mundialmente conocida como la mujer con las uñas más largas del mundo, la estadounidense Ayanna Williams, recordista oficial de Guinness World Records, ha decidido realizarse una manicura muy especial para desprenderse de sus uñas durante el fin de semana pasado.
La Dra. Allison Readinger, de Trinity Vista Dermatology, en Forth Worth, Texas (EE.UU.), utilizó una herramienta eléctrica rotativa para cortar las extensas uñas de la recordista tras medirlas una última vez.
Como resultado, Ayanna, nacida en Houston, batió su propio récord de las uñas más largas en ambas manos (femenino) con una nueva longitud de 733.55 cm (24 pies 0,7 pulgadas), dejándolas crecer desde su confirmación inicial en 2017.
Es la primera vez que la recordista se corta las uñas desde principios de los años 90, por lo que fue una emotiva y agridulce despedida.
"Llevo varias décadas dejándome crecer las uñas. Estoy preparada para una nueva vida. Sé que las voy a echar de menos, pero ya es hora de que se vayan".
Ayanna ha dedicado más de 28 años a dejarse crecer las uñas. En cierto modo, esta característica se ha convertido en una parte fundamental de su personalidad.
Incluso de niña, a la tejana siempre le gustaron las uñas y el nail art. Tiene buenos recuerdos cuando le pedía a su madre que comprobara lo largas que eran sus uñas y si podía pintarlas de ciertos colores.
Desde esa temprana edad, Ayanna ha hecho realidad sus sueños.
Ayanna fue reconocida oficialmente por primera vez por sus largas uñas en 2017 y fue una de las estrellas del libro de Guinness World Records 2018.
En ese momento sus uñas medían 576.4 cm (18 ft 10.9 in) y necesitó más de dos frascos de esmalte y 20 horas para hacerse la manicura.
Recientemente, se necesitaron unos 3 o 4 frascos de esmalte de uñas y Ayanna tuvo que completar la tarea a lo largo de varios días.
Ayanna enfrentó varios desafios en el día a día con sus uñas, y no podía realizar algunas actividades como lavar los platos o poner las sábanas en la cama.
"Con mis movimientos tengo que ser muy cuidadosa. Así que normalmente me mentalizo para el siguiente paso que tengo que dar para asegurarme de que no me hago daño con las uñas, o me las rompo. Me entusiasma cortarme las uñas porque tengo ganas de un nuevo comienzo".
Pero ahora con sus uñas cortas, podrá hacer diferentes actividades con mucha más facilidad.
Antes del cortarlas, Ayanna dijo que recibió muchas reacciones de personas quienes veían sus uñas en público, pero la mayoría fueron positivas y de apoyo, especialmente las de los niños.
"Tengo una cosa que hago con los niños cuando se me acercan y me dicen '¿Esas son tus uñas?' y yo les digo 'sí' y entonces les pregunto y les digo '¿Cuántos años tienes?' y ellos me dicen 'tengo diez o siete', y yo les digo '¿Adivina cuántos años tienen mis uñas? Tienen como 28 o 29 años. Son más viejas que tú'".
Aunque esta aventura ha sido memorable para Ayanna, ella está mirando hacia adelante y hacia el legado que su récord establece para las futuras generaciones, especialmente para sus nietos y bisnietos.
Sus delicadas uñas serán conservadas y expuestas en el museo Ripley's Believe It or Not! de Orlando (Florida), algo que a Ayanna le hace mucha ilusión.
"Va a ser increíble. Va a ser como una escultura de cera de mí misma, aunque sólo sean mis uñas. No puedo esperar a ver eso, de verdad. Voy a estar sonriendo de oreja a oreja. Pensándolo de verdad, es increíble".
Aunque la medición más reciente de Ayanna ha superado su propio récord, el récord de las uñas más largas de la historia en ambas manos (femeninas) sigue en manos de Lee Redmond (EE.UU.), que empezó a cuidarlas en 1979 hasta alcanzar una longitud total de 8,65 metros.
En un futuro inmediato, Ayanna tiene previsto volver a dejarse crecer las uñas, aunque no con la misma longitud que tenía antes.
Sin embargo, independientemente del título de su record, siempre serán uno de sus accesorios favoritos.
"Con o sin mis uñas, seguiré siendo la reina. Mis uñas no me hacen, ¡yo hago mis uñas!"
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